¿Cómo podemos hacer estas navidades un poquito más saludables?


Normalmente las navidades son una época del año asociada con grandes excesos en nuestra alimentación.  Pero, realmente esto tiene porque ser así.

Yo creo que las navidades no difieren tanto con otras épocas del año que ya sea por vacaciones, bautizos, bodas, cumpleaños, reuniones con amigos… también tenemos celebraciones y comemos diferente a los días de rutina y sin embargo nuestra forma de pensar en esas comidas festivas es diferente a cómo enfocamos las comidas festivas en la navidad.

¿Porqué entonces todas las navidades la gente gana peso?

El consumo de productos estacionales poco saludables cómo turrones, mazapanes, galletas, postres, pastas… desde finales de octubre hasta principios de febrero junto a las comidas festivas que por el factor social nos predisponen a comer más cantidad de comida y con elaboraciones más calóricas junto al consumo recurrente de bebidas alcohólicas y/o refrescos en dichas celebraciones son un conjunto de factores que hacen que cada año escuchemos la famosa frase de: “estas navidades he engordado x kilos”.

Pero bueno si tú no quieres caer en los tópicos y decides mantener tus buenos hábitos durante estas fechas y ser flexible con tu dieta en los días festivos te dejo unos consejos para que te sea más sencillo:

  1. Diferenciar entre los días festivos y los días de rutina. Es decir, es normal que cenas como la de nochebuena, comidas como la de navidad o cualquier tipo de reunión con amigos y/o familia que para ti sea importante las ingestas de alimentos sean más copiosas de lo habitual y no es malo dentro de un estilo de vida saludable. El problema viene si desde el día 22 o23 de diciembre hasta el 7-8 de enero estamos comiendo en todas nuestras tomas comidas muy calóricas y menos saludables de lo habitual.

Por eso para mí la clave es diferenciar las comidas o cenas festivas (que serán 7 u 8 tomas) de las comidas más de diario en la que es más importante comer de forma saludable.

  1. Planificación de los menús. Una buena forma de incluir platos más saludables en nuestras celebraciones es que te animes y colabores con tu familia y/o amigos a la hora de pensar que vamos a preparar.

La comida saludable también puede tener mucho sabor. Unas croquetas de espinacas y queso gorgonzola, un pincho de tortilla de patata con calabacín y cebolla o una merluza en salsa verde son ejemplos de que con ganas y un poco de imaginación podemos encontrar platos sabrosos y saludables para nuestros días festivos.

  1. Limita el consumo de productos “navideños”. Turrones, mazapanes, polvorones, bombones… la navidad se asocia con este consumo de dulces navideños y aunque dentro de una dieta flexible se pueden tomar de forma ocasional, en estas fechas se tiende a abusar de estos alimentos y no está de más que sepamos que impacto tienen en nuestro organismo.

Ej. Turrón. Producto hipercalórico (unas 500kcals aprox. Por cada 100grs) con una composición rica en grasas de poca calidad e hidratos de carbono simples (azúcar, miel…). Nos lo tomamos todos o casi todos los días y normalmente dos trozos porque está la tableta encima de la mesa con los postres. Al final de las navidades un montón de calorías vacías que no nos producen nada de saciedad y nos facilita mantener ese superávit calórico que se acabará almacenando y haciendo que aumente nuestro peso y nuestro % de grasa corporal.

Hay veces que simplemente recogiendo la mesa después de que todo el mundo haya comido y no quiera más se evita el acabar cogiendo más tarde por aburrimiento.

 

  1. Muévete. Si te gusta hacer deporte aprovecha estos días de descanso para hacer el deporte que te gusta.

Si no te gusta el deporte, simplemente muévete, ves a visitar a los familiares, queda con los amigos para dar un paseo, sal a bailar…

Hay un mundo entero de actividades que implican moverse y quizás estás vacaciones encuentres cuál te gusta a ti. Ya verás cómo luego te sientes mucho mejor.

 

  1. Descanso.  Si tienes vacaciones aprovecha estos días para dormir bien, sin modificar en exceso tus rutinas de sueño y verás que el tiempo despierto lo aprovecharás mucho más y si tu preocupación es el peso verás que es más fácil controlar la comida y el peso si descansamos adecuadamente.

Si no tienes vacaciones, bienvenido al club. Trabajando es más fácil seguir la rutina los días no festivos y por lo tanto disfrutar de estás fiestas de una forma más saludable.

 

  1. Eliminar o disminuir lo máximo posible el consumo de alcohol. Esto es algo que deberíamos hacer durante todo el año ya que cómo se postula la who (world health organization) desde 1985 la única cifra segura de consumo de alcohol es 0.

El alcohol, incluso el de la cerveza o el vino, aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular y aumenta el riesgo de desarrollar varios tipos de cáncer.

Por todo esto y por la cantidad de calorías vacías que aporta te invito a reflexionar si realmente te vale la pena consumir alcohol en estas fechas.

 

 

  1. Práctica la alimentación consciente. Que quiere decir esto que tan bien suena. Realmente no es otra cosa que decir que estés atento a tus sensaciones de hambre y saciedad. Normalmente, si no hay alguna patología implicada, son buenos indicadores de cuánto debemos comer.

Una vez estés lleno deja de comer que las sobras se pueden guardar en la nevera o congeladas y ya tendrás comida para otro día.

 

Por último, pero no menos importante, disfruta de estás fechas, haz planes con los amigos, ves a las comidas y cenas sociales, disfruta de la familia. Tiene mucha más importancia lo que haces del 6 de enero al 22 de diciembre que lo que haces del 22 de diciembre al 6 de enero.

 

Nutricioncongracia les desea felices fiestas.

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